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Daniel Seixo, rojipardismo lingüístico periférico, reivindicar la exclusión de la diversidad

Un fenómeno que hace tiempo se percibe es que desde los nacionalismos periféricos, supuestamente desde una izquierda en lo económico pero reaccionaria en lo nacional e identitaria, se emula las peores actitudes del españolismo de extrema derecha en temas de lengua. Un ejemplo sería el rechazo a la diversidad lingüística de allí donde vives o la pretensión de enviar "de vuelta a su país" incluso siendo oriundo a quién no asume la identidad nacional tal como la entiende el rojipardo.



Nadie que defienda la inclusión podría ser considerado rojipardo, pero en esta postura se defiende la exclusión sin ambages. Esta es la única lengua, y si no te gusta, te marchas. Nos trae recuerdos al "aquí se habla en cristiano/español y si no te marchas". Parte de la idea que solo hay una lengua auténtica en el territorio. Niega la presencia del español como otra lengua hablada por cientos de miles de personas, cuando no millones, con sus correspondientes derechos y representación social. Y rechaza la posibilidad de que sea usada despóticamente. 


Además pretende que el uso de tu lengua supone un ataque a la suya, cuándo nadie pretende excluirla, solo el rojipardo a la inversa. Quién quiere el uso de las dos lenguas más habladas para el es el fascista, el que incluye, y no quién se niega a usar dos y quiere solo una, el que excluye, como es su caso. En esta retorcida teoría quien quita derechos es el justo, y quién se preocupa que los tenga ambas comunidades lingüísticas, el fascista.

La reacción excluyente que considera fascista la inclusión

Arriba podéis ver un ejemplo de Daniel Seixo, @SeixoDaniante la petición de que la información esté en ambas lenguas, acusa de desprecio u odio hacia la única representada. una evidente invención, una inferencia que ninguna mente actuándo bajo la lógica podria realizar ya que no han pedido que se elimine el cartel en gallego. Y la reacción es expulsar del territorio, y negarse a que haya carteles en español lengua materna de muchísimos gallegos. Posición que adoptaría el españolismo más rancio de una manera similar a: "Si no te gusta en español, te marchas, nada de usar dialectos en España".