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La trampa del porcentaje con las estadísticas del catalán


El catalanismo usa los porcentajes de lenguas al servicio de las políticas del miedo habituales en el fascismo, invoca el peligro, la amenaza, una supuesta emergencia social. Es el caso del idioma que usa por defecto la Generalitat, minoritario entre el pueblo catalán, la consecuencia es que poniendo la lengua materna, el español, y por tanto mayoritaria de manera justa y natural, como amenaza consigue generar un desprecio hacia los derechos lingüísticos hispanohablantes. 

Pero igual que las políticas fascistas ante la inmigración están fundamentadas en sesgos y falsedades, también las cifras presuntamente catastróficas sobre lenguas tienen una base fundamentada en las trampas estadísticas, concretamente en la del porcentaje. Sin dejar de lado que el español se mueve en un espacio donde está excluido como lengua vehicular en la enseñanza, de las profesiones de la administración pública, de la cultura local y mucho más, lo que convierte en una acción a contracorriente y con perjuicios económicos y sociales mantener la lengua materna, a pesar de lo cual su comunidad persiste.

Pongamos algunos ejemplos de la trampa del porcentaje:


1) Si la economía de España crece un 2% sobre 1.000.000, entonces crece 20.000 Si la economía de Alemania crece un 1% de 10.000.000 entonces crece 100.000. Un político te dirá "España crece más que Alemania" para vender datos positivos, pero lo cierto es que Alemania ha crecido 5 veces más y la diferencia en realidad se aumenta mucho. Es una trampa que usan habitualmente. 

2) Si unas acciones salen a la venta por un valor de 100 cada una, y pierde el primer año un 50%, pero el segundo y tercer año, cada uno suben un 25% te dirán que son un valor que se ha estabilizado, pero en realidad, han pasado de 100 a 50, a 62,5 y a 78,125. Están más bajas que antes, pero te han dado una falsa impresión de equilibrio!

3) Un ejemplo más, si la vivienda sube de 1.000 a 1.500 euros el metro cuadrado, diremos que incrementa un 50%, si baja de 1.500 a 1.000 diremos que desciende un 33%, la impresión que causa es bien diferente!


Además las matemáticas en cuestiones sociales no pueden usarse de manera mecánica. Uno de los motivos que generan el engaño es usar conjuntos diferentes para establecer comparaciones engañosas. Si la población del año 2000 en Cataluña era 6 millones de habitantes, y la del año 2023 es de 8 millones. No partes de la misma base y obvias que el crecimiento poblacional de Cataluña no ha sido natural (vegetativo) si no exógeno, se han incorporado millones de migrantes, muchos de ellos de América Latina.

La única manera de no hacer una comparación engañosa para saber si se pierden hablantes de catalán es tomar la cantidad de hablantes en cifras, no porcentajes, por ejemplo 2 millones y compararlos así: ¿Cuántos millones había en el año 2000 y cuantos en el año 2023? y esto precisamente es lo que sucede, se mantienen los hablantes.

Si usas porcentajes haces trampa, veámoslo, si hay 6 millones de habitantes en Cataluña, y 2 millones hablan catalán, eso es el 33,3%. Si se incorporan 2 millones más de migrantes, son 8 millones, si sigues usando el porcentaje, entonces "desciende" al 25%. Pero este descenso no es real, siguen siendo 2 millones de hablantes. Ni hay bajón, ni ha perdido hablantes el catalán.

El catalán tenía 2 millones de hablantes en 2003 y los mantiene en 2018 (último dato disponible)


La respuesta correcta a este trampa es: "No hay descenso de catalanohablantes, siguen siendo 2 millones", lo más simple y directo.

Y de hecho es el español el que pierde hablantes desde su lengua materna, hasta la lengua habitual, como podéis ver en el gráfico, cerca de medio millón de hispanohablantes abandonan su lengua. Mientras que el catalán la aumenta en cerca de 300.000. No solo están creando una sensación de miedo irreal, si no que están ocultando un daño real a la otra comunidad lingüística, el español, por el momento mayoritaria que es la perjudicada pero es presentada como un enemigo al que se puede discriminar y marginar en la escuela por su mera existencia.