Instrumentalización del antiracismo por "izquierda" catalanista que es extrema derecha al mismo tiempo

Si, no hay nacionalismo/catalanismo de izquierdas, pero si hay extrañas aberraciones y mutaciones que crea el nacionalismo entre personas en algunos elementos de izquierdas con otros de la propia extrema derecha. Pero como dice un dicho alemán "Si en una mesa hay un nazi y diez personas que lo respetan, en esa mesa hay once nazis", de la misma manera: "Si en un movimiento hay racismo cultural hispanófobo y otras diez luchas justas, en ese movimiento son todos racistas". Y esto afecta a todo el catalanismo.

Un primer ejemplo plenamente aceptado es Alianza Catalana y Silvia Orriols. Comparte la gran mayoría de los elementos de la extrema derecha blanca europea con el resto de grupos catalanistas de "izquierdas", como la defensa de una lengua única pública y de uso social, la inmersión excluyente, la teoría de la nación catalana en lugar de una población de mayoría multicultural, la hispanofobia, la afirmación que la diversidad es genocidio cultural contra ellos. Pero es señalada por su islamofobia. Sin islamofobia Alianza Catalana no se diferenciaría de Junts, ni tampoco de ERC o la CUP salvo en algunas otras cuestiones económicas.

Y como se disfraza con elementos de la izquierda Silvia Orriols, o incluso Junts, al igual que lo hace la Liga Norte de Salvini? Utilizando retórica de izquierdas, como por ejemplo el anti imperialismo que esgrime Silvia Orriols, o por ejemplo erigiéndose en defensores del movimiento LGTBI colgando la bandera en el balcón del ayuntamiento, mientras sus esbirros en redes sociales ponen las fotos diciendo que como va a ser Alianza Catalana extrema derecha si está con los derechos de los gais. Incluso disfrazan su islamofobia al igual que VOX diciendo que no puede permitir prosperar culturas que están contra los derechos de las mujeres, generalizando la atribución de actitudes a millones de personas.



Si la extrema derecha puede manipular de esta manera, no podría hacerlo también un movimiento rojipardo pretendidamente de izquierdas como la CUP, ERC o el comunismo y anarquismo catalanista? Vayamos a otro ejemplo también plenamente aceptado. El Frente Obrero, con un discurso contrario al feminismo, la inmigración ilegal y la izquierda "woke" al mismo tiempo montan todo un galimatías conceptual en que beben de la lucha de clases y el marxismo, actitudes revolucionarias y patrióticas (de una patria excluyente), incluso se inspiran en Lenin para su organización y claman estamos aquí para Luchar por España, igual que los catalanistas gritan Visca la Terra.



El uso instrumental del antirracismo por parte de la extrema derecha e izquierda rojiparda es un fenómeno complejo y controvertido que ha surgido en ciertos contextos políticos, no vamos a referirnos hoy a todos los colectivos por cuestión de espacio, pero pondremos un ejemplo de ayer mismo, el nuevo colectivo La Palestra, un nuevo ateneo rojipardo que pretende ser abanderado del movimiento SHARP, Skinheads Against Racial Prejudice. Existen otros movimientos similares como el podcast l'Arrabassada o la militante Julia Ojeda que terminó inscribiéndose en un partido ultra como Alhora.

Este colectivo de Girona, La Palestra, en realidad es una variante de Hogar Social que repartía alimentos entre la gente para atraer a los barrios a la extrema derecha. La diferencia es la gradación en compartir más o menos elementos con la izquierda y el uso instrumental antiracista. Usan toda la simbología del ultranacionalismo y racismo catalanista como el ave fenix, la cruz de Sant Jordi, y se posicionan contra el racismo, pero solamente de manera superficial. Su objetivo es convertir el catalanismo en el grupo dominante y pisotear la multiculturalidad real y efectiva de Cataluña, solo consentida mientras sea marginal y folclórica, y se adhiera a su visión de Cataluña propia de la Edad Media, no la Cataluña moderna y diversa

En Inglaterra la extrema derecha se apropió de manera parecida del movimiento Skin, El National Front subvierte los grupos skins de clase trabajadora con el discurso de extrema derecha británico y que tenían justo el mismo símbolo, la cruz de San Jorge. El movimiento Sharp trató de contrarrestarlo, pero fue demasiado tarde. Este Grupo de Girona mezcla ambas cosas en un batiburrillo confuso, pero no está exento de supremacismo nacionalista que destila por todos los poros, incluidos sus símbolos. Si es hispanófobo, no es antirracista. Si es catalanista y defiende la "nación catalana" tampoco es antirracista.

Apoyan grupos culturales minoritarios, aquellos que no son un peligro para su hegemonía, ya que debido a que el catalanismo es minoritario buscan "ampliar la base" y ganar apoyos, compartiendo ciertas líneas. Pero lo cierto es que solo lo hacen porque esos grupos son débiles porque son minoritarios y por tanto nunca llegarán a privarles del dominio social, pero en número la suma de todos ellos puede suponer una baza que marque la diferencia. Si no fuera así también defenderían a los hispanohablantes y sus derechos lingüísticos y no hablarían de una nación, si no de una comunidad diversa.

Divide y vencerás, tratan de poner a unos migrantes contra otros, los migrantes africanos, asiáticos, etc, contra los migrantes hispanohablantes y sus descendientes, ya sean andaluces o colombianos.

Al mismo tiempo les sirve para lavar la cara al catalanismo y para ello no dudan en atacar a grupos como Alianza Catalana ya que los arabes les pueden servir en su lucha, al igual que en el pasado la Generalitat promovió la inmigración marroquí por odio a la hispanoamericana, y aún hoy día trata de ponerselos ERC a favor con clases de Islám y de árabe en las escuelas.

En base a este tipo de colectivos rojipardos catalanistas describiremos 5 objetivos comunes de su estrategia para disimular la parte de su esencia que es de extrema derecha:

1) Lavado de imagen, intentan presentarse como tolerantes y progresistas al adoptar superficialmente la retórica antirracista, mientras continúan promoviendo políticas y agendas que perpetúan la discriminación y la exclusión cultural hispanohablante. Así lo hace el catalanismo por ejemplo con la escuela monolingüe o la marginación cultural y social desde las instituciones que controlan, todo ello forma parte de lo que defienden.

2) Cooptación de movimientos antirracistas, incorporan aspectos de la lucha antirracista en su discurso, pero se trata de una variante de la extrema derecha para intentar reclutar seguidores de movimientos progresistas para sus propias causas, desviando la atención de su agenda principal.

3) División y polarización, al presentarse como defensores de la igualdad racial, la extrema derecha puede intentar dividir a la sociedad y crear tensiones dentro de los movimientos antirracistas genuinos, sembrando la desconfianza y debilitando la unidad. Pretenden que el apoyo a los derechos culturales y lingüísticos hispanohablantes es el enemigo, cuando están sojuzgados por el poder de la Generalitat.

4) Manipulación de la opinión pública, utilizan el antirracismo como un medio para ganar apoyo político o legitimidad, la extrema derecha puede distorsionar y manipular la narrativa sobre cuestiones raciales para sus propios fines, desviando la atención de sus políticas y acciones discriminatorias. Es una variante más retorcida que la de Alianza Catalana que hace sacrificios para poder llevar a cabo su objetivo principal, la hispanofobia. Si atacas a Alianza Catalana por islamófoba como vas a ser racista? de esta manera consiguen hacer pasar desapercibida la hispanofobia y congraciarse con algunas comunidades migrantes. A pesar que defienden de la misma manera la exclusión hispanófona, tal como Alianza Catalana pretende borrar la cultura árabe, la izquierda catalanista persigue en todos los espacios cualquier expresión hispanohablante, en las escuelas, el gobierno, las instituciones, los rótulos de la calle, o la cultura.

5) Deslegitimación de movimientos antirracistas, tratan de desacreditar a los verdaderos movimientos contra el racismo catalanista intentando que se asocien con extremismo o agresividad, y socavando las demandas legítimas de justicia y equidad de los hispanohablantes.

Es importante estar alerta ante estas estrategias y reconocerlas como intentos de manipulación política. El verdadero antirracismo implica un compromiso genuino con la igualdad cultural y lingüística, la justicia social y la lucha contra todas las formas de discriminación, independientemente de quién lo promueva.